Las cosas le van realmente bien a la firma coreana, quien recientemente nos ha mostrado la segunda generación de su KIA Niro. Ha llovido mucho desde que nos presentaran en 2016 la primera entrega del modelo. Desde entonces, se han vendido nada menos que 38.435 unidades en España. Para probar el nuevo modelo, nos hemos puesto al volante del KIA Niro 1.6 PHEV.

Con un tamaño a medio camino entre el Ceed y el Sportage, el Niro se ubica por encima del e-Soul. Como este, ahora luce una estética más personal y atrevida. Pretende conquistar a esos usuarios que valoran la tecnología electrificada, ya sea por inquietud, conciencia medioambiental, beneficio económico o por obtener la codiciada pegatina de la DGT.

Hay un Niro para todos los público y razones no le faltan para triunfar. Sobre todo, ahora que cuenta con lo último de la marca en todos los aspectos. Los cambios introducidos afectan a la estética, la calidad y el diseño interiores, las posibilidades de equipamiento y, por supuesto, la conectividad. Se mantiene los motores híbrido, híbrido enchufable y eléctrico (e-Niro).

El Niro PHEV posee la etiqueta CERO de la DGT -frente a la ECO de los HEV convencionales-. Por tamaño y tipo de carrocería, son muchas las alternativas en el mercado. Es el caso de los Toyota C-HR, KIA XCeed, Honda HR-V, Subaru XV, MG ZS, Peugeot 2008, Lexus UX, Jeep Compass, Dacia Duster o SsangYong Korando. Eso sí, no todas cuentan con opción PHEV.

Ya era hora de que el KIA Niro recibiera el nuevo lenguaje de diseño de la marca. He de reconocer que yo fui de los que se asustó cuando lo vio en fotos -algo que también me ocurrió con el Sportage-. Sin embargo, lo cierto es que en persona gana puntos, muchos puntos. Es atrevido, proporcionado y ofrece más posibilidades de personalización.

Completamente rediseñado desde cero, el nuevo Niro ha sido desarrollado bajo la filosofía Opposites United. La fuerte influencia del concepto Habaniro 2019 es evidente. Puede apreciarse en el diseño exterior, con un elegante y atrevido aspecto crossover y un pilar C en otro color. Hay nueve colores exteriores y 18 combinaciones bicolor para los Drive y Emotion.

El pilar C ancho en la parte trasera mejora el flujo de aire para mejorar la aerodinámica. Se mezcla con las luces traseras en forma de boomerang. La característica ‘cara de tigre’ de KIA también se ha transformado para el nuevo Niro. Ahora se extiende desde el capó hasta la propia luna delantera, que replica su diseño y ofrece un generoso tamaño.

El diseño frontal cuenta con unas llamativas luces diurnas angulares «Heartbeat» que crean una apariencia llamativa en la carretera. La tecnología LED para la iluminación es de serie. El exclusivo diseño de luces traseras verticales destaca la aerodinámica y la tecnología. No menos interesantes son el marcado alerón con la tercera luz de freno y el techo esculpido.

Con 4.42 metros de largo (+65 mm), 1.83 metros de ancho (+25 mm) y 1.57 metros de alto, es mayor en todas sus cotas. Se ha desarrollado a partir de la plataforma «K» de tercera generación, creciendo la batalla hasta 2.720 mm (+20 mm). Los anchos de vía delantera y trasera alcanzan 1.573 mm y 1.585 mm, respectivamente. El coeficiente Cx baja hasta 0,29.

En la vista lateral, se aprecian más marcados los pasos de rueda. Allí encontramos llantas de 16 a 18 pulgadas. En este caso vemos las de mayor tamaño. Están calzadas con gomas Continental PremiumContact 6 en dimensiones 225/45 18 95V XL en ambos ejes. Destaca también la generosa superficie acristalada con lunas posteriores tintadas de serie.

Sobre el techo encontramos una antena de tipo aleta de tiburón. En el acabado más alto también equipa techo solar practicable eléctrico. En función del acabado podemos ver barras de techo longitudinales o no. La tapa de carga para la batería va ubicada en la aleta delantera del lado del conductor. En el eléctrico, podemos encontrarla en el frontal.

Si el exterior rezuma personalidad, el interior tampoco decepciona en este sentido. Lo que más llama la atención es el salto de calidad que ha llevado a cabo la marca en los últimos años. El planteamiento del diseño interior revela un nuevo espacio orientado al conductor. Este juega con un carácter atrevido, la suavidad en las texturas y la innovación en la tecnología.

La aerodinámica eficiente y los materiales sostenibles se unen a través del diseño cohesivo. El nuevo KIA Niro exhibe nuevos materiales reciclados. El revestimiento del techo está hecho de papel pintado reciclado y los asientos están hechos de Bio PU con Tencel de hojas de eucalipto.

También se utiliza pintura libre de BTX en los paneles de las puertas para minimizar el impacto en el medio ambiente y reducir los residuos. La elegante consola central es fácil de operar y cuenta con la palanca de cambios electrónica tipo dial. Se coloca en la amplia superficie negra de alto brillo para una apariencia simple y moderna.

Los asientos son muy cómodos y cuentan con un diseño minimalista muy moderno casi de una pieza. Ofrecen unos reposacabezas regulables y ergonómicos, así como muchas comodidades. Vemos regulación eléctrica, ajuste lumbar, calefacción y ventilación. También el volante, inspirado en el del EV6, es calefactable en este acabado.

Presume de un diseño minimalista y muy particular. Además de os controles habituales, incluye el selector de modos de conducción. Tras él está el panel de instrumentos digital. Le acompaña una enorme pantalla central de infoentretenimiento. Este sistema de alta tecnología incluye pantallas dobles de 10,25 pulgadas (8 pulgadas en el acabado sencillo).

La tecnológica pantalla táctil y el avanzado controlador integrado actúan como centro neurálgico. El conductor y el pasajero pueden controlar las funciones de conectividad, funcionalidad y usabilidad. Ambos sistemas han sido creados para ser fáciles de utilizar, muy intuitivos y suaves al tacto. Lo cierto es que no admiten tacha en este sentido, ni en gráficos.

El cuadro de instrumentos está equipado con una pantalla de cristal líquido TFT de última generación. Genera unos gráficos increíblemente precisos y claros, con facilidad de uso. Podemos personalizar su apariencia al gusto o mediante la selección de modos de conducción. No menos curiosa resulta la botonería táctil ubicada a media altura del salpicadero.

Nos permite acceder a todas las funciones de navegación y climatización gracias a la permuta de la botonera digital. El túnel de transmisión acoge varios huecos portaobjetos. Tampoco faltan el botón de arranque, el dial de la transmisión, el reposabrazos, el cargador inalámbrico para smartphone de 15 W y varios botones para controlar la climatización de los asientos.

Los cinturones delanteros son regulables en altura y el reposabrazos central fijo.

Lo que no me ha gustado es el abuso de plástico negro brillante. Cuando es nuevo, este plástico luce muy bien, pero conforme pasan los días, las marcas e imperfecciones aparecen por todas partes. En términos de habitabilidad, cabe destacar la mejora del espacio interior. Se posiciona entre los modelos más amplios del segmento. También es excelente el acceso.

Las plazas traseras son cómodas y ofrecen espacio para tres personas. Pese a ser bueno en anchura, realmente solo dos adultos irán cómodos en la segunda fila. Destacan especialmente el espacio para las piernas y para la cabeza, incluso en la plaza central. Eso sí, el mullido de esta es más dura y el túnel central con salidas de ventilación algo molesto.

En la segunda fila podemos equipar un enchufe de 220 V, dos tomas USB de tipo C y unos asientos calefactables con dos niveles de intensidad. El KIA Niro ofrece un diseño interior inteligente y con abundantes espacios de almacenamiento. Sin embargo, echamos en falta algo de flexibilidad, como unos asientos traseros con ajuste longitudinal y del respaldo.

Este Niro ofrece 1.011 mm de espacio para las piernas de los pasajeros de la segunda fila. El espacio para la cabeza detrás llega a 1.005 mm. La capacidad del maletero es de 348 litros en el híbrido enchufable. El HEV son 451 litros y el e-Niro 475 litros. Para maximizar la comodidad, los asientos traseros se pueden abatir en una proporción de 60:40.

Esto permite que el espacio de carga llegue a 1.342 litros en este caso. Es posible abatir los asientos traseros con solo tirar de una palanca y en el espacio de carga encontramos ganchos, argollas, iluminación y un pequeño doble fondo. Las formas son muy regulares y el acceso amplio. Por último, cabe destacar que el borde de carga se sitúa a 770 mm del suelo.

Como la generación anterior, la nueva entrega aterriza con motorizaciones híbrida (HEV), híbrida enchufable (PHEV) y eléctrico puro (EV). Este último recibe el nombre de e-Niro. La versión híbrida convencional tiene la mecánica 1.6 HEV de 141 CV en combinación con una transmisión de doble embrague DCT.

La versión híbrida enchufable hace uso de una nueva motorización 1.6 PHEV con 183 CV. Gana 40 CV gracias a un nuevo motor eléctrico más potente. También es mayor la batería, ofreciendo más autonomía y mejores prestaciones. El eléctrico tiene un bloque de 218 CV, eliminando la anterior opción de entrada. En conjunto, suponen una mejora interesante.

En la siguiente tabla puedes encontrar un resumen de las características técnicas de cada versión:

Ahora centrémonos en el PHEV objeto de la prueba. El motor de combustión es el conocido bloque de aluminio T-GDi con 1.580 cm3 de cilindrada. Cuenta con dos árboles de levas en la culata, inyección directa y Start/Stop. Eroga 105 CV (77 kW) de potencia a 5.700 rpm y 147 Nm de par a 4.000 vueltas. Se combina con un motor eléctrico de 84 CV (62 kW) y 203 Nm de par.

En conjunto, nos ofrece una potencia combinada de 183 CV (134,5 kW). Respecto a su predecesor, cuenta con una batería de mayor tamaño. En concreto, 11,1 kWh. Gracias a ello, la autonomía es ahora de 65 km en ciclo combinado WLTP (+16 km) y 85 km en ciclo urbano. La caja de cambios es la automática de doble embrague y seis relaciones.

En el nuevo Niro se mantienen las levas ubicadas tras el volante y que giran solidarias a este. Se unen así al modo secuencial de la palanca de cambios. Pueden actuar de dos formas, siempre en función del modo de conducción seleccionado. En ECO permiten aumentar en hasta tres niveles la capacidad de regeneración del vehículo; además de un modo ‘Auto’.

En modo SPORT el motor recarga la batería en mayor medida.

De hecho, la capacidad de retención que provocan es tal que podemos ir incluso jugando con las levas en ciudad o en una carretera convencional sin necesidad de tener que pisar el freno. En SPORT, sin embargo, las levas actúan como unas levas convencionales en un automóvil de combustión. En otras palabras, nos permiten subir o bajar de marcha.

Al activar el modo SPORT también son apreciables una respuesta más reactiva al acelerar, cambios más rápidos y la dirección se endurece. Brinda un empuje lineal que resulta más que suficiente en la mayoría de las circunstancias. En cifras, hablamos de un 0 a 100 km/h en 9.6 segundos. Recupera de 80 a 120 km/h en 6.7 segundos. La velocidad punta es de 168 km/h.

Más convincentes que las prestaciones resultan los consumos, ya que con la batería cargada es posible moverse en ciudad en el entorno de los 2,5 litros. Eso sí, depende de la frecuencia con la que entre en acción el motor de combustión. En carretera, con batería, podemos movernos por debajo de 4.0 litros, subiendo a unos 6.0 litros cuando ésta se descarga.

Para que os hagáis una idea, durante la presentación hicimos un recorrido Madrid-Guadarrama por el puerto de Galapagar. Al llegar a Guadarrama, quedaba más de la mitad de la batería y el consumo fue de 2.9 l/100 km. Tras la vuelta a Madrid, sobraba batería y el consumo final fue de 3.6 l/100 km. Destaca, además, la gestión que hace el sistema entre ambos motores.

No agota desde un principio toda la batería, sino que equilibra el uso de ambos motores todo el trayecto. El cambio, por su parte, resulta muy suave, como en el resto de la gama KIA. Sí me he percatado que en modo ECO se siente algo más lento en ciertas situaciones. En todo caso, su funcionamiento es más que adecuado al tipo de vehículo, mucho mejor que un CVT.

La capacidad de carga máxima es de 3,3 kW en CA.

KIA, por su parte, homologa un consumo combinado de apenas 0.9 litros a los 100 km en ciclo WLTP. En una conducción real te será prácticamente imposible igualar o acercarte a esa cifra. El depósito de combustible tiene una capacidad de 37 litros, lo que permite obtener una autonomía bastante decente. Debes saber que pierde un total de 6 litros de capacidad.

Además, Kia presenta el ‘Modo de conducción Greenzone‘. Este transfiere automáticamente el (P)HEV al modo de conducción EV para satisfacer la demanda de soluciones de movilidad sostenible (como Madrid Central). También reconoce los lugares favoritos de un conductor, incluidos el hogar y la oficina registrados en el sistema de navegación como una zona verde.

En esta nueva entrega del KIA Niro, los ingenieros han hecho del SUV un modelo más agradable al volante. Resulta un coche muy equilibrado y es especialmente apreciable la mejora en el aislamiento y en la calidad de rodadura. En conjunto se siente algo más dinámico, pero también más confortable en la gran mayoría de las situaciones.

Si bien no se trata de un modelo que destaque en ningún aspecto, cumple con nota en todos. Es un conjunto realmente polivalente. Al funcionamiento silencioso y suave de esta mecánica se une una mayor armonía de todos los componentes. Parece que todo se ha afinado para ofrecer una conducción más placentera en todos los sentidos.

Creo que el equilibrio es uno de sus puntos fuertes. Para lograr esta polivalencia, la suspensión -esquema McPherson en el eje delantero y paralelogramo deformable en el trasero- se ha afinado para alcanzar un mayor compromiso entre confort de marcha y agilidad de reacciones. No es deportivo, pero en carreteras de montaña se desenvuelve con firmeza.

Permite un paso por curva muy controlado, con reacciones naturales y una gran facilidad de conducción. Pese a ello, es fácilmente apreciable que su enfoque es otro. Ni los cambios de trayectoria ni la dirección invitan a una conducción deportiva. Eso sí, sobre firmes deteriorados, es capaz de ofrecer una respuesta más suave y una menor tendencia a los rebotes.

La capacidad de remolque es de 1.300 kg en remolques con freno (600 kg sin frenos).

En ciudad es un coche cómodo de conducir. Ni sus medidas son excesivas ni la dirección nos dificulta las maniobras. Es algo blanda para trazar curvas y carece de feedback en ese sentido, pero en la urbe se muestra muy cómoda. Tampoco faltan múltiples ayudas a la conducción. El diámetro de giro entre bordillos es de 10,6 metros y hay 2,66 vueltas de volante entre topes.

El tacto de los frenos se mantiene bastante bueno pese a la frenada regenerativa. Eso sí, se nota que los primeros grados del pedal regenera energía. Ofrece buena sensibilidad y graduación a la hora de aplicar la fuerza de frenada. Encontramos discos de freno ventilados en ambos ejes. Tienen 280 mm de diámetro en el eje delantero y 284 mm en el trasero.

En el apartado de seguridad y asistencias a la conducción, el Niro permite equipar lo último de la marca. Gracias a ello vemos asistente dinámico para luces de carretera, control de crucero inteligente, detección de fatiga, asistente de aparcamiento, asistencia de carril, sistema de detección de ángulo muerto, sistema de advertencia de colisión frontal con frenada de emergencia…

La gama del KIA Niro contempla los niveles de acabado Concept, Drive y Emotion. Desde el acabado de acceso, el crossover coreano ya cuenta con un completo equipamiento. Incluye iluminación LED, aviso pre-colisión, frenada automática en ciudad, lector de señales, control de crucero, SmartBeam, ocho airbags, sensor de aparcamiento trasero, asistente en atascos…

Otros elementos incluidos de serie en todos los acabados son el climatizador automático dual, llantas de aleación ligera de 16 pulgadas, ordenador de viaje, sistema multimedia integrado, radio DAB, Apple CarPlay, Android Auto, USB, freno de mano eléctrico, asistente al arranque en cuestas y detector de fatiga, entre muchos otros elementos de confort y seguridad.

El nivel Drive suma el acceso sin llave, sensor de lluvia, espejo interior fotosensible, control de crucero adaptativo, tapizado mixto tela/piel, asiento del conductor con ajuste lumbar eléctrico, faros LED, navegador con pantalla de 10,25 pulgadas, monitor ángulo muerto, cámara posterior, sensores de aparcamiento delanteros, arranque por botón, etcétera.

Por último, el nivel Emotion añade el volante calefactable, asientos delanteros eléctricos y calefactables, tapizado específico, llantas de aleación de 18 pulgadas, portón posterior «manos libres», pedales de aluminio, sistema de aparcamiento remoto y pack LED interior completo, entre otros. Se ofrecen dos paquetes para los acabados Drive (Design) y Emotion (Luxury).

Los precios recomendados para la gama KIA Niro 2022 sin descuentos ni promociones son los siguientes:

El KIA Niro es ya un producto de éxito consolidado en nuestro país. Con su nueva apariencia, su amplia oferta mecánica y unos precios competitivos, ha logrado escalar hasta lo más alto de las cifras de ventas. Mucha personalidad propia, buenos consumos, espacio, una gran puesta a punto y un completo equipamiento son algunos de los puntos fuertes de esta nueva generación.

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